Aprendiendo a comer solito

Si hay algo por lo que siempre nos preocupamos las madres es por cómo comen nuestros hijos (bueno, por lo que comen, lo que duermen, lo que miran la tele, lo que leen…vaya, que las madres somos de preocuparnos… pero con el comer más aún).

Con la lactancia materna siempre te ronda la duda sobre si comerá suficiente. Cuando toma biberón tienes dudas sobre si estarás haciendo lo correcto. Y cuando empieza a comer comida todo son dudas.

Ahora parece que para que empiecen a comer sólido lo único que hay que hacer es dejar a tu hijo sentadito frente a un platito con trocitos de alimentos enteros y dejar que la magia de la comida se produzca (esta nueva magia se llama Baby Led Weaning).

Y luego cuando pones a tu hijo frente a las lentejas, macarrones, o brócoli te sorprende ver que tu hijo no come. 

Pero lo que hay que tener claro con el baby led weaning (BLW) es que es un método para continuar con lactancia porque comer trozos cansa. El pequeño R* empezó a comer alimentos enteros con 6 meses tal y como mandan los cánones del nuevo mantra BLW. Se sentaba a la mesa con cara de placer, miraba el plato con devoción y al tercer trozo ya no quería nada más y directamente se dedicaba a dejar caer la comida al suelo y descubrir con su propia experiencia la ley de la gravedad. Y para llenarse bien la tripa quería su teta, y punto.

Otros días le poníamos su plato y disfrutábamos viendo como iba cogiendo los trocitos y poniéndoselos en la boca. Nos quedábamos encantados pensando lo mucho que había comido ese día… hasta que le levantábamos de la mesa y descubríamos que el suelo estaba cubierto de todos esos trocitos, ¿había llegado a comerse alguno? No sabíamos si comía poco o mucho pero la teta siempre la pedía.

Por eso, nosotros, como compaginamos su alimentación con mi horario laboral hemos optado por alternar el BLW con las papillas tradicionales. Y a él siempre le ha parecido fenomenal… aunque dejando claro que los purés los dejaba para cuando no tenía a su madre cerca.

Con 18 meses y sin lactancia diurna, R* come un plato de nuestra  comida, o parecido, pero triturado, facilitándoselo. Y después le damos un plato de trocitos para que vaya comiendo él (lo que también nos permite comer tranquilamente a nosotros de mientras).

Cuando A* nació, hace ya 7 años, y nosotros no habíamos oído hablar de Baby Led Weaning nos dijeron que para que los bebés empezaran a cogerle gusto a la comida lo mejor era dejarles manosearla. No pretendíamos alimentarlo así solo dejarlo experimentar con los alimentos. Y esa perspectiva siempre me ha parecido mucho más realista.

No creo que nosotros hagamos nada muy diferente a lo que toda la vida han hecho las abuelas con los niños… Dejándoles probar todo aquello que pasaba por delante suyo. No será BLW pero sabemos que nuestro hijo come bien y disfruta con la comida.