
Dos niños, dos habitaciones y ningún uso, esa es la realidad de nuestra casa.
Siempre había creído muy importante ofrecer a mis hijos un espacio propio donde poder hacer todas sus cosas, un lugar donde jugar, refugiarse y construir su propio mundo, pero es creencia se ha ido al traste en estos años.
Mis hijos no quieren estar solos en su habitación prefieren jugar donde estamos todos. Pintar, leer o estudiar en compañía. Sus habitaciones son grandes, con espacio para jugar y mesas de estudio pero cuando juegan es en el salón comedor y cuando hacemos manualidades es en la mesa del comedor (o en casa de que A* necesite más concentración alguno de nosotros le acompaña en su habitación). Ellos quieren construir su mundo junto al nuestro (al menos de momento).
Aprovechar espacios según su uso
Así que para aprovechar mejor los espacios de casa estoy pensando en hacer que compartan habitación y aprovechar la otra habitación para montar un estudio para mayores y pequeños, que trabajando en mi rinconcito de trabajo actual me falta espacio.
Y de paso, aprovecho para ojear habitaciones infantiles de ensueño …


La vida evoluciona
No puedo evitar pensar que en unos años querrán su propio espacio pero también creo que en cada momento deberíamos adaptarnos a las necesidades de ese momento. Y ahora no necesitamos habitaciones particulares. Necesitamos espacios compartidos.
El truco será adaptar nuestro espacio a nuestras necesidades sin hacer grandes inversiones y pensando en que cuando cambien las necesidades haremos nuevas adaptaciones.
Cuando encuentre la solución, os la enseño.
